De acuerdo con Planet Ark, un grupo ambientalista con sede en Sydney, Australia, algunos cristales de las luces navideñas llegan a durar miles de años. A esto se agrega el plástico y los metales que acompañan los adornos. Por ejemplo, aquellos fabricados con latón o cobre tienen una vida de más de 60 años, mientras que los de aluminio persisten hasta 200 años.

Por eso es importante seguir estas recomendaciones:

- Evitar tirar las luces navideñas en los contenedores de basura. En su lugar, procurar que se reciclen en establecimientos que reciben metales o equipos electrónicos.

- Adquirir adornos que puedan emplearse más de una vez. Probá hacer colgantes con materiales reciclados: cartón, telas, envases pintados.

- Antes de comprar tus regalos, investigá cómo han sido fabricados, así como los materiales usados.

- Para envolver los regalos utilizá papeles o bolsas reciclables o reutilizables.

- Apagá las luces navideñas si no estás en casa. ¡Ahorrá energía! Una buena opción es usar luces led, su consumo es mucho menor.

- No prepares más alimentos de los que se van a consumir.

- Evitá la pirotecnia, ya que puede causar contaminación en el aire, agua y suelo.

- Los globos del deseo son muy bonitos pero pueden generar incendios forestales, así que tratá no encenderlos.   

Recordá que lo más importante es pasar tiempo junto a tus seres queridos. Cuidar el medio ambiente y tener una Navidad ecológica ayudará a reducir riesgos para su salud. Diviértete sanamente y evita los excesos.
 
 

Fuente: clikisalud.net