Los aromas y las emociones

El sentido del olfato es, sin duda, nuestro mayor aliado para hacer frente al mundo que nos rodea. 

Son los olores quienes nos alertan, nos conecta no solo con nuestros instintos básicos como atacar o huir, sino con momentos de nuestro pasado, haciéndonos revivir sentimientos y emociones.
Los olores son capaces de activar todas las regiones emocionales del cerebro; esto es debido a la interconexión de las regiones cerebrales implicadas en el procesamiento de ambas sensaciones, siendo el sistema límbico  (en especial la amígdala) y el centro integrador por excelencia.
Los aromas, han sido un arma de curación desde la antigüedad. Utilizando los aceites esenciales como método  analgésicos, antibióticos, antisépticos, astringentes, sedantes, expectorantes y diuréticos.

También, los aceites esenciales ayudan a calmar malestares gastrointestinales, dolor menstrual, el estrés, trastornos del estado de ánimo, problemas circulatorios e infecciones respiratorias.
En cuanto a los beneficios psicológicos, la aromaterapia tiene un efecto calmante que facilita la relajación y la paz mental.
Hay muchas formas en las cuales puedes aplicar la aromaterapia en tu vida cotidiana. Es el método más común, que consiste en colocar algunas gotas de aceite esencial en un pañuelo o en un tazón de agua caliente e inhalar suavemente el aroma.

Otra manera es a través de los masajes, colocando las esencias en aceite de oliva para evitar reacciones alérgicas. También puedes diluir un par de gotas, en una bañera llena de agua tibia para un efecto relajante; es importante que no se utilice agua caliente, puesto que el aceite puede evaporarse.

Aunque existe una infinidad de aceites esenciales con diferentes beneficios para la salud, algunos de los más utilizados son:

Ciprés
Calma el sistema nervioso y alivia los síntomas de la menopausia, las alergias y el estrés.

Geranio
Alivia los síntomas premenstruales y la depresión, calma el sistema nervioso y levanta el ánimo.

Jengibre
Ayuda a prevenir y aliviar los mareos y las náuseas, estimula al sistema inmunológico contra los resfriados y la gripe, alivia el sistema digestivo y mejora la circulación.

Pomelo
Permite regular las emociones, alivia el estrés y la ira y ayuda a combatir los resfriados y los problemas respiratorios.

Lavanda
Regula la hipertensión arterial, alivia los dolores de cabeza debidos a la tensión o al estrés y alivia picaduras de insectos y quemaduras.

Limón
Reduce el cansancio mental, alivia el estrés, estimula la concentración y mejora la circulación.

Menta
Relaja y calma los músculos del estómago y del tracto gastrointestinal trastornos, problemas respiratorios y tensión nerviosa.

Romero
Alivia los dolores musculares y reumáticas, además de regular la presión arterial baja.

Ylang ylang
Es útil en el tratamiento de los problemas sexuales, previene la hiperventilación, calma la ansiedad, ayuda a regular el pulso, y reduce los ataques de pánico y la depresión.