Invierno e hipertensión, ¿cómo se relacionan?

La hipertensión arterial generalmente no presenta síntomas, pero puede causar problemas de salud graves, como accidente cerebrovascular (ACV), insuficiencia cardíaca, ataque al corazón y problemas renales. Esto puede controlarse con cambios en el estilo de vida (alimentación saludable y adecuada, actividad física) y con medicación.

Durante el invierno, con el descenso de la temperatura se produce en nuestro organismo un estrechamiento transitorio de las arterias (vasoconstricción), lo que reduce la pérdida de calor corporal en ambientes fríos.

En personas hipertensas este mecanismo de protección puede ocasionar una elevación de la tensión arterial, por lo que durante el invierno podrían resultar afectadas, por lo que es necesario que consulten a su médico por un posible ajuste en su tratamiento y para saber qué otros cuidados debe tener.

La exposición a bajas temperaturas puede producir espasmos coronarios, lo que puede ocasionar un descenso transitorio de flujo sanguíneo.

Por todos estos motivos, se recomienda que durante los días fríos las personas hipertensas sean muy cuidadosas y tomen conciencia del cuidado que deben tener.

Abrigate muy bien, evita exponerte al frío si no es necesario y no realices esfuerzo físico luego de comer, ya que durante la digestión el aparato digestivo requiere mayor cantidad de sangre.