Pizzetas caseras

Ingredientes

Prepararemos la masa de la pizza, mezclando la levadura, la sal y el agua en un bol, poco a poco, añadiremos el aceite, sin dejar de remover y lo dejaremos reposar, unos 10 minutos, hasta que la mezcla empiece a burbujear. Incorporaremos la harina, amasándola, durante unos 15 minutos, hasta que la masa esté suave y elástica.
Embadurnaremos un recipiente hermético o un bol con aceite de oliva, poniendo en él la masa, tapándola y dejándola levar, durante 1 a 1 1/2 horas, hasta que doble de tamaño.
Precalentaremos el horno a 250º C.
Para montar la pizza, estiraremos la masa con las manos sobre una superficie untada de aceite, levantando un poco el borde.
Pincharemos el fondo de la masa con un tenedor y extenderemos un poco de salsa.
Luego que ya este pronta le podemos agregar salsa, tomate fresco, oregano, albahaca, aceitunas o los gustos que prefieramos, cubriéndola con la mozzarella troceada.
En este caso les proponemos dos opciones diferentes: Cebolla y morrones confitados.
La introduciremos nuevamente en el horno, durante unos 8 minutos, hasta que el borde esté bien dorado.
Servir de inmediato.

Notas:
Para elaborar la cebolla , calentaremos 1 cucharada de aceite en una sartén, añadiremos la cebolla cortada en láminas y las freiremos, a fuego fuerte, durante unos 5 minutos, agregaremos 1 1/2 cucharadas de azúcar, removiéndolo, hasta que se disuelva. Agregaremos entonces 4 cucharadas de vinagre balsámico, dejándola cocer, a fuego lento durante unos 6 minutos, hasta que quede con una textura de confitura.

Para confitar los morrones, retiraremos las semillas y cortamos en tiritas. Los pondremos en una olla y los cubriremos con aceite de oliva. Los coceremos, a fuego muy bajo, dejándolos confitar, durante 1 hora, sin que el aceite llegue a hervir. Cuando esté frío, lo pondremos en un bote hermético, conservándolo en la nevera. Se puede agregar ajo y pimienta negra para dar más sabor.